Samanta Villar ya se expuso a vivir entre cartones y a dejar de comer durante 21 días. Ahora, la periodista pasará 21 días fumando porros. Desde el primer momento en que prueba esta sustancia, Samanta empieza a perder el control de sí misma, por lo que no puede hacer su vida y realizar su trabajo de una forma normal... Su estado de ánimo y psicológico se altera y hace que, en ocasiones, se sienta muy mal físicamente. Una situación que servirá para entender la importancia del tema que se trata: 21 días fumando porros.
Samanta Villar se expone esta vez al uso continuado del cannabis, una de las denominadas drogas blandas que puede llegar a convertirse en una seria adicción. La periodista comparte escenario y situaciones con los consumidores y detractores, y en su consumo diario se somete a pruebas preparadas por el experto en comportamiento animal de la Universidad Complutense de Madrid, José Antonio López.
El problema del consumo se ha generalizado. Según la última encuesta sobre Drogas y Alcohol del Ministerio de Sanidad, el 36,2% de los españoles han consumido en alguna ocasión porros, y un 8,7% lo hace de forma habitual.
En este proceso, Samanta estuvo con Fernanda de la Figuera, una mujer de 65 años que considera la marihuana una planta sagrada. Tal es así que la fuma a diario y cocina con ella. Además, la periodista se puso en contacto con el presidente de la Federación de Asociaciones Cannábicas y con miembros de su club, llamado Pannagh, que se encargan de cuidar una plantación colectiva y repartir su cosecha entre los miembros sin exponerse al mercado negro. Una grieta legal les permite sobrevivir.
Pero también Samanta conoce los testimonios del otro lado de la balanza, de los que han sufrido los efectos del cannabis y ven en él un peligro importante. La periodista acudió a Proyecto Hombre y conoció a Tomás, un joven de 21 años que comenzó a fumar porros con tan sólo 12 años o Toni, un padre de familia que ha estado fumando durante 25 años y que asegura que los porros le arruinaban la vida. Se volvió irascible y perdió el control sobre sí mismo.
No podía faltar en estos 21 días una incursión a Amsterdam. Samanta Villar acude a la Cannabis Cup, la mayor feria del cannabis en el mundo organizada desde hace 21 años una revista americana. Allí se pondrá en contacto con todos los consumidores y turistas que no se pierden este encuentro. Y conocerá a los Hunter, una familia norteamericana formada por un padre, una madre y sus dos hijos que, desde hace cinco años, dedican sus vacaciones para viajar a Amsterdam y fumar juntos.